El gato de los chinos ha pisado el césped del campo de entrenamiento blaugrana, en el que ha dado unos toques de balón con su nuevo compañero, también de inmediata incorporación por un precio desorbitado, Paulinho. "Pobrecillo. Le ha tirado unos caños y unos dribblings que lo ha dejado tirado en la hierba. Pero bueno, hay que tener paciencia. Paulinho se adaptará", asegura Bartomeu.