La puesta en marcha de las luces de Navidad de Vigo se han convertido en un clásico navideño como los saltos de esquí de fin de año o recordar la metedura de pata de Álvaro Ojeda con Copérnico durante la desfilada de Reyes.
Sin embargo este año, las toneladas de luces que ha puesto Abel Caballero en la ciudad gallega han provocado ni más ni menos que un nuevo Big Bang.
Y es que este sábado, el encendido de los once millones de luces esparcidos por todo Vigo ha provocado una violenta explosión solo comparable con la del Big Bang original o el pedo que te echaste el día que comiste fabada y cenaste comida mexicana.
Tras la explosión, la destrucción del sistema solar y de toda forma de vida conocida ha sido inmediata, convirtiendo lo que debía dar el tiro de salida de la Navidad en la detonación final de la Humanidad.