fachaventura espejos
LA SALA DE LOS ESPEJOS DEFORMADOS. Un clásico de todos los parques de atracciones. En Fachaventura, un fascista puede entrar vestido como tal y, tras mirarse en los espejos, estos le retornarán la imagen de un franquista con piel de demócrata. Es decir, ¡de un votante del PP! Los espejos también te hacen más alto y ario, cosa de agradecer en caso de que, a pesar de ser nazi, seas un enano medio moro, como Santi Abascal.