Tras descubrir que los borbones suministran armamento a Arabia Saudí, Pablo Casado ha abdicado de sus profundas convicciones monárquicas y se ha hecho republicano.
Esta mañana, el líder del PP se ha fotografiado en las calles de Madrid subido a un coche y mostrando una gran bandera tricolor, imagen que más tarde ha compartido en su cuenta de instagram con los hastags #noalosmoros #vivalarepública #mueraelrey
"No había suficiente con que los inmigrantes nos quitaran el trabajo y las mujeres. ¡Ahora también quieren quitarnos las armas!" ha exclamado un enervado Casado.
Siempre fiel a su filosofía de llevar sus convicciones al límite, Casado ha tomado una foto del Rey Felipe VI, la ha colocado del revés y le ha prendido fuego ante el estupor de los presentes. Acto seguido, ha preguntado si alguien sabía si en Ikea vendían guillotinas.
El líder popular ha impulsado una reforma exprés de los nuevos estatutos del partido, en la cual se especifica que el PP "luchará con todo su empeño por el restablecimiento de la legítima república y el fin de la tiranía de la dinastía borbónica".